Me he descargado Jelly en el iPhone, lo nuevo de Biz Stone. Si, ese Biz Stone, el co-fundador de Twitter. Lo he lanzado y me ha pedido que me registre con Facebook. Oh, y como eso no le bastaba, también con Twitter.
No recuerdo haber visto ningún aviso, pero una vez das tu permiso para el acceso a esas redes sociales, ya te agrega todos los contactos que tienes ahí. No hay opción de filtrado, ni siquiera hay forma de manejar tu perfil. No hay configuración ni opciones, ni forma de darse de baja, salvo eliminando la app.
En este sentido Jelly es una de las redes sociales más opacas que he visto.
La interfaz es muy visual, una mezcla de Instagram y Quora, donde las imágenes con pregunta van apareciendo en forma de ficha. Fichas que puedes descartar deslizándolas habia abajo, o en las que puedes aportar tu respuesta.
Using Jelly is kinda like using a conventional search engine in that you ask it stuff and it returns answers. But, that’s where the similarities end
Todo tiene un aspecto muy fugaz, tipo Snapchat. Todavía no he comprobado si se pueden guardar las preguntas con sus respuestas en algún sitio, o hacer una búsqueda de algo que te interese en particular. Pero me da que no se puede. Lo que sí se puede es marcar una pregunta en particular para seguir sus respuestas.
Jelly está limitado por su propio carácter visual. Dado que, en teoría, sólo se pueden hacer preguntas sobre aquello que aparece en la fotografía que envías, eso deja fuera un gran número de temas.
Incluso, si tienes demasiados contactos en Twitter y Facebook, es probable que te pases mucho tiempo descartando fichas sin llegar a ver algo interesante, lo que puede ser realmente aburrido.
Claro que al final los usuarios utilizaremos Jelly, seguramente, para cosas muy distintas a las que Biz Stone tenía en mente al crearla. Yo de momento sólo he visto preguntas más o menos humorísticas y mucho spam. Pero nada realmente útil, como se puede encontrar, por ejemplo, en Quora.
Y es que hay dos formas de usar Jelly. Una es, digamos, para pasar el rato mientras esperas el metro, y consiste en navegar por las preguntas de los usuarios y ver si puedes meter baza en alguna. La otra consiste en enviar preguntas y esperar a que alguien las conteste.
Lo que hace Jelly, al final, podría hacerse con otras redes como Facebook. Poner una foto y hacer una pregunta sobre ella para que cualquiera pueda responder. Como servicio autónomo la verdad es que no creo que vaya a durar mucho. Acabará integrándose en Twitter o acabará sumando funcionalidades adicionales que no tienen nada que ver con las que tiene ahora, si es que quiere sobrevivir. Todo depende de que consigan ofrecer una experiencia diferenciada y atractiva, más allá de la novedad de estos días.
Lo que tengo muy claro es que no va a convertirse en un servicio de ayuda, ni va a solucionar nada a nadie. Que los smartphones son para divertirse hombre.