El sistema de comentarios perfecto

Estos días ha tenido mucha repercusión la decisión tomada por Techcrunch de abandonar el sistema de comentarios de Facebook y pasarse a Livefyre, un plugin muy similar a Disqus. La diferencia entre tener el sistema de comentarios de Facebook y el de Livefyre es que este último permite publicar logueandose no sólo con Facebook, además de otros añadidos. Nunca he usado Livefyre, pero si Disqus, que tuve instalado durante algunas semanas en mis blogs.

Y antes de Disqus usé el sistema de comentarios de Facebook, en un intento por incrementar los comentarios de los lectores al mismo tiempo que eso le daba supuestamente más visibilidad a los blogs en la red social. Pero desde hace unos días he regresado al tradicional sistema de comentarios de WordPress.

Facebook + WordPress

En un principio mantuve el sistema de comentarios de Facebook junto con el de WordPress, de modo que bajo cada post el lector podía elegir con qué sistema comentar. Gran error, ya que eso inducía a confusión y en ocasiones tenía dos hilos de conversación distintos que no ayudaban nada a los nuevos lectores que llegaban al post.

Facebook

Tras esa primera experiencia quedó sólo el sistema de Facebook. Una de las cosas que menos me gustó de usarlo fue que ralentizaba mucho la carga del blog. Y al final comprobé que no sólo no se incrementaba el número de comentarios sino que posiblemente muchos lectores se quedaban fuera de poder dar su opinión, al verse obligados a usar Facebook contra su voluntad.

Disqus

Como había leído bastantes cosas buenas de Disqus, decidí darle una oportunidad. Desde el primer momento me gustó por sus muchas opciones para comentar con distintos logins, y el sistema de voto de los propios comentarios. En la parte negativa que Disqus también ralentiza la carga del blog, y además me obligaba a loguearme cada vez que quería moderar los comentarios, incluso estando ya dentro del dashboard del blog. Por no mencionar que los comentarios no quedan en la base de datos, sino en Disqus, de donde tendría que importarlos si alguna vez lo desinstalaba.

Sin comentarios

En este blog opté por eliminar los comentarios. Nunca ha habido muchos, así que tampoco se perdía tanto. Los sustituí por enlaces para que quien quisiera dejar una opinión pudiera hacerlo en Twitter o en Facebook. Pero una vez más, la respuesta fue escasa.

WordPress

Al final he vuelto a recuperar el sistema de comentarios de WordPress. Las razones son muchas: no ralentiza la carga del blog, los comentarios quedan en la base de datos e incluso pueden aportar beneficios SEO al blog, puedo moderarlos fácilmente desde el iPhone y el iPad con la aplicación de WordPress, los lectores son más propensos a usarlo, ya que es menos intrusivo y no requiere identificación alguna salvo el email (que puede no ser auténtico). En definitiva, me facilita las cosas a mi, y les da mayor libertad a los lectores.

¿Qué pierdo usando el sistema de comentarios de WordPress?

En comparación con el sistema de Facebook o Disqus pierdo algo de visibilidad en redes sociales, y saber exactamente quien está detrás de cada comentario. No me parece tanto, porque al final soy yo quien decide si apruebo el comentario o no. Si tuviera cientos de comentarios al día me preocuparía, es posible que tuviera que cambiar de opinión. Pero, por ejemplo en mi blog con más comentarios van tan sólo 7.588 comentarios en 8 años, lo que no es como para preocuparse. Y digo tan solo porque realmente son muy pocos comentarios, se lo aseguro.

Al final, tanto tiempo buscando el sistema de comentarios perfecto, y ya venía instalado por defecto.